En algunas películas vemos lo siguiente: ella llega huyendo de mal de amores a un pueblito perdido en el mapa, allí conoce a un tipo (generalmente divorciado o viudo), el tipo que se mantuvo virgen por largos años, comienza a perseguir a la gruñona (actúa así para mostrar que está desconsolada por sus sinsabores espermáticos), pero el viudo es todo un tipo y ella comienza a sentir olvidados hormigueos (y parece que él también) y de repente de improviso él la besa y es correspondido.
Cuando todo parece correr sobre rieles, aparece en escena el malo de la película, con anillo de diamante, una cara de arrepentimiento y una cartera llena de bellos recuerdos que hace que ella se enternezca. Más ella, recuerda ese beso y manda a la mierda a su ex y sale a la calzada en busca del divorciado.
Mientras estas cosas suceden en el hotelucho, en un bar cercano el viudo se pone a beber (que no es su costumbre) y saca a bailar a una vecina (que tampoco es su costumbre) y la vecina coquetea con su vecino divorciado y en ese momento la forastera los ve a través de la amplia vidriera y se le caen los calzoncillos de la desilusión, en ese preciso momento el viudo la distingue y sale en su persecución, más la forastera que conoce mejor los vericuetos del pueblucho llega sana y salva pero adolorida a su hotelucho y en la seguridad de su habitación nos califica a todos los copuchentos de ser cortados con la misma tijera y pide y consigue un medio para huir de nosotros.
El divorciado se hunde en la desesperación, más surge una voz (una hijita, un amigo o un padre) que lo convencen que salga corriendo en busca de la forastera que llegó al pueblucho con mal de amores; él la alcanza cuando ella está a punto de poner el pie, la agarra por un brazo y la besa y ella se olvida de lo que pensó de nosotros.
Usted podría preguntarse, ¿realmente sucederán estas cosas en la vida real?
Quizás necesitamos imaginar que a otr@s les pueden suceder ;)
ResponderEliminarBesos