1. Nadie es dueño de la
verdad absoluta
La tolerancia tiene que partir necesariamente del principio fundamental de que ella no es dueña de la verdad absoluta, porque cada esposo tiene una visión singular del matrimonio.
Gustavo explica que es importante “estar conscientes de que siempre pueden existir diferentes puntos de vista, y que ninguno es más válido que el otro”.
Así, para desarrollar la tolerancia se debe empezar por comprender que un polvacho furtivo, es tan solo uno de los muchos posibles.
La tolerancia tiene que partir necesariamente del principio fundamental de que ella no es dueña de la verdad absoluta, porque cada esposo tiene una visión singular del matrimonio.
Gustavo explica que es importante “estar conscientes de que siempre pueden existir diferentes puntos de vista, y que ninguno es más válido que el otro”.
Así, para desarrollar la tolerancia se debe empezar por comprender que un polvacho furtivo, es tan solo uno de los muchos posibles.
2. Cuide el lenguaje
verbal y no verbal
Gustavo aconseja reflexionar sobre el valor de la palabra. “El bla bla, la lengua, así como el lenguaje no verbal o la forma de expresarse pueden suponer un foco de conflicto o de falta de respeto”
Podría decir algo como “Está bien, dime más acerca de eso”. “¿Qué te hace pensar eso?”
Gustavo aconseja reflexionar sobre el valor de la palabra. “El bla bla, la lengua, así como el lenguaje no verbal o la forma de expresarse pueden suponer un foco de conflicto o de falta de respeto”
Podría decir algo como “Está bien, dime más acerca de eso”. “¿Qué te hace pensar eso?”
3. Manténgase actualizado
“Informarse de la complejidad de la infidelidad. Definitivamente no es la de hace unos años, cambió y se amplió drásticamente”, explica Gustavo.
Ballivian acota que una adecuada aceptación y percepción del otro y el entorno ayudará a ser más tolerante.
“Informarse de la complejidad de la infidelidad. Definitivamente no es la de hace unos años, cambió y se amplió drásticamente”, explica Gustavo.
Ballivian acota que una adecuada aceptación y percepción del otro y el entorno ayudará a ser más tolerante.
4. Sea empático
Gustavo explica que “es necesario escucharla con una mente abierta, intentando comprender su postura y ponerse en su lugar, ser empático”.
En la mayoría de los casos el esposo no tiene ni idea sobre cómo fue la vida pasada de la esposa o por qué actúa de tal o cual manera. Platique, explíquele lo que siente y el deseo de comprenderla.
5. Exprese su punto de vista sin herir
Es necesario entender que las opiniones son relativas y discutibles y que no se tiene la verdad absoluta. Por ello, dentro el marco del respeto, se debe “expresar el punto de vista propio sin herir los sentimientos de las demás”, explica Gustavo.
De la misma manera, se puede exponer los argumentos de una posición sin necesidad de burlarse de la opinión contraria, eso sólo creará más fricción al herir sus sentimientos.
Por ello, averigüe su perspectiva sin ser intolerante o agresivo. Es mejor usar enunciados en primera persona en lugar de hacerlos en segunda.
Es mejor decir: “Pienso que es razonable que los moteles pongan a disposición los condones”, a expresar: “Eres un tonto por pensar que los moteles no deben repartir condones”.
Gustavo explica que “es necesario escucharla con una mente abierta, intentando comprender su postura y ponerse en su lugar, ser empático”.
En la mayoría de los casos el esposo no tiene ni idea sobre cómo fue la vida pasada de la esposa o por qué actúa de tal o cual manera. Platique, explíquele lo que siente y el deseo de comprenderla.
5. Exprese su punto de vista sin herir
Es necesario entender que las opiniones son relativas y discutibles y que no se tiene la verdad absoluta. Por ello, dentro el marco del respeto, se debe “expresar el punto de vista propio sin herir los sentimientos de las demás”, explica Gustavo.
De la misma manera, se puede exponer los argumentos de una posición sin necesidad de burlarse de la opinión contraria, eso sólo creará más fricción al herir sus sentimientos.
Por ello, averigüe su perspectiva sin ser intolerante o agresivo. Es mejor usar enunciados en primera persona en lugar de hacerlos en segunda.
Es mejor decir: “Pienso que es razonable que los moteles pongan a disposición los condones”, a expresar: “Eres un tonto por pensar que los moteles no deben repartir condones”.
La tolerancia a los
cuernos es de humanos
“Si la tolerancia es
aceptar y abrazar la diferencia, será importante no tener miedo, respetar a los
que no son o no piensan como tú, considerándolos como iguales, saber escuchar.
Ser tolerante nos hace más humanos”
Hay hombres que piden tolerancia a sus mujeres para determinados comportamientos, pero no son capaces de aceptar que ellas se comporten de la misma manera.
ResponderEliminarUn abrazo.
Buenos consejos sin duda.
ResponderEliminarNo solamente en los casos expuestos, deberíamos ser mas tolerantes. La actual situación de conflicto social aquí en Chile ameritaría que bajáramos la intensidad de las descalificaciones, necesitando centenares de miles de ciudadanos ese baño de humildad para no sentirse dueños absolutos de la verdad, ni siquiera con matices.
ResponderEliminarHola Chaly, después de tantos meses intento de a poco regresar por este mundo de letras y pensamientos. Gracias por todavía recordarme.
ResponderEliminarVeamos, si bien hemos avanzado en desterrar el machismo en nuestra querida Sudamérica, todavía persiste y se aferra intentando no desaparecer. Tengo la absoluta certeza que una mujer moderna podría responder de esa forma. Asumiendo su sexualidad como un algo que le pertenece y que considera como parte de su intimidad; pero las más maduras, ufff, no. No pueden asumir un "simple polvo" como algo casual. Generalmente la mujer madura llega a la infidelidad porque ha entregado su corazón.
Retomando los conceptos: tolerancia, empatía, comunicación fluida, son elementos políticamente necesarios para que: una pareja, un país, una sociedad prospere y crezca. Mi país los tuvo olvidados un tiempo, pero alcanzó a despertar, solo espero que Bolivia también los recupere por el bien de nuestros amados territorios.
Un gran abrazo Chaly.