jueves, 13 de julio de 2023

0719: el pípila

Llegó un inspector de la Secretaría de Educación Pública a una secundaria pública y le hizo saber al Director que iba a realizar un reporte de evaluación sobre el conocimiento de los alumnos. Se metió a un salón y le pidió la lista de alumnos al profesor en turno y eligió un muchacho al azar.

- Lugones, ¿me podrías decir el nombre de la persona que quemó la puerta de la entrada de la Alhóndiga de Granaditas?

El joven bajó la cabeza, se puso nervioso y empezó a sudar.

- Bueno, si no puedes decirme el nombre, dime al menos su apodo...

- La verdad no sé, Señor Inspector, pero le juro por mi madre santa que yo no fui.

Otro muchacho tomó la palabra para decir que conocía a Lugones desde hace cinco años y que era uno de los chicos más tranquilos de la colonia y podía asegurar que él no había sido.

El Inspector frunció el ceño, contuvo el enojo y les ordenó a los dos muchachos que salieran del salón y lo esperaran en la Dirección.

Interviene el Profesor:

- Señor Inspector, estoy seguro que ellos no fueron, ambos son muy tranquilos y buenos estudiantes. Si no saben el nombre ni el apodo de quién quemó la puerta de la Alhóndiga , es porque no se juntan con pandillas. Seguramente fue alguien de otro colegio...

El Inspector sale hecho una furia y se dirige a la Dirección para pedir la remoción del Maestro. El Director le dice:

-Le pido que lo considere.El Profesor Torres, aparte de impartir la materia de Historia, da Biología, Civismo y Literatura; nunca falta a clases, lleva 14 años en esta Secundaria y tiene muchas influencias en el Sindicato. En esta colonia no es fácil conseguir maestros. Mejor dígame qué tan dañada quedó la puerta por el incendio y veremos si la podemos reparar y si no, pues hacemos una colecta entre los maestros y padres de familia, para comprar una nueva para la Alhóndiga. Total... ¿Qué tan cara puede salir? 

2 comentarios:

  1. jajaja está visto que los sistemas educativos están igual de mal en todas partes. No hay alumnos que no aprenden, casi siempre lo que hay es porfesores que no saben enseñar... sobre todo lo que no saben jajaja Un abrazo!

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  2. Prometo que no tengo nada que ver con el deterioro de la dichosa puerta.
    Un abrazo.

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