viernes, 5 de julio de 2019

0326: sorpresa

-¿Perico?...  ¡¡Perico!!
-Ahh ¡Hola!
-¡Qué alegría verte! ¿Por qué no me avisaste que venias?
-Pues… no tengo tu teléfono
-Vamos hombre, para eso está messenger
-Verdad… verdad, no había pensado en eso
-Espera, voy a llamar a mis hermanas…
-¡Detente plis!
-¿No quieres que avise a mis hermanas?
-Pues…, calma, él que ha llegado soy yo, soy la sorpresa y me gustaría hacerlo a mi manera, parece que te has olvidado como soy, no me gustan las cosas precipitadas y menos aún que alguien —en este caso tú—me maneje a su antojo. Déjame que yo sea el que maneje los tiempos y los movimientos. Regreso después de trece años, primero quiero mirar ciertas calles, algunos edificios y cuando se me pase la emoción del regreso y este en paz conmigo mismo, me podré enfrentar con el pasado.

2 comentarios:

  1. No se sabe si la sorpresa de la llegada ha sido más o menos grande que la reacción por las palabras de bienvenida.
    Saludos.

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  2. awesome article..
    thanks for sharing and have a nice day

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