Es un hecho que el tipo
tiene aptitudes para el debate. Sus padres no han querido convencerlo de nada,
pero ha crecido en una casa con libros, en un contexto de charlatanes y de
personas que trabajan con la palabra. Sus maestras de jardín de infantes lo definen
como un "bebé conversador".
Suena bastante cómico
pero así es.
A veces las ganas de
expresarse superan ampliamente sus aptitudes de hablante y en esas ocasiones no
se da por vencido: estira las vocales y trata de llenar todos los silencios
cuando le toca el turno dentro de una conversación, como si entendiera todo lo que
se dice pero le costara poner ciertas ideas en palabras.
Algo parecido a lo que
nos sucede a los adultos cuando tratamos de incorporar un idioma.
Sin embargo, desde hace
varias semanas mi hijo repite una palabra cuyo significado ni mi mujer ni yo
logramos comprender.
Mi hijo dijo
"euwo" y lo repitió bien clarito enfatizando la "e"
inicial. Euwo, euwo, lo dice con determinación, como lo haría un adulto, sin la
exagerada saliva del balbuceo. Parece una palabra salida de una lengua del
África.
La primera vez que la
escuché la repetí varias veces hasta que ajustamos el ritmo y la dijimos al
unísono. Estaba maravillado por el descubrimiento y cuando me escuchó
pronunciar la palabra me miró satisfecho, creyendo que lo había comprendido.
¿Qué significa "euwo"? Con mi mujer nos miramos desconcertados.
Podría querer decir
indistintamente fuego, huevo o juego. Cada tanto, de la nada le recuerdo el
término y mi hijo sonríe y la repite. No sé por qué mi esposa me reta. Tal vez
sea por temor a esa pronunciación desconocida.
Tan chiquitín y ya le gusta el dinero. Quiere que le des EUROS.
ResponderEliminarUn abrazo.