domingo, 10 de julio de 2016

679: CONOCE CUAL ES TU ROL

Realiza sin tu pareja el siguiente cuestionario. Elige en cada pregunta la respuesta con la que más te identifiques. Sé sincero y contesta con humildad. Una vez finalizado no repases el cuestionario ni modifiques tus respuestas.

1. Si presientes que tu pareja se va a molestar por alguna razón o situación que haya sucedido, tú acostumbras...
a) A enfadarme por el hecho de que ella se enfade y le pongo ejemplos de tantas cosas que a mí me han molestado y he aguantado sin quejarme.
b) A recoger pruebas y argumentos para demostrarle que no tiene motivos para enfadarse y que no debiera tomárselo así. Al final se dará cuenta y acabará dándome la razón.
c) Me pongo muy nervioso y me avanzo a darle explicaciones de lo sucedido y a pedirle disculpas (aunque no sea culpa mía) para evitar a toda costa que se enfade.
d) A dejar que se enfade, tiene derecho a que algo le moleste aunque yo no esté de acuerdo y procuro no poner más leña al fuego y darle algún consejo (si me deja).

2. Cuando discutís, las frases que más repites (o similares) son:
a) “Parece que todo lo hago mal”, “es que nunca me escuchas”, “pasas de mí”.
b) “Qué voy a hacer contigo”, “no hay manera de que lo entiendas”, “¿lo ves? Te lo dije”.
c) “Lo siento”, “perdóname”, “no te enfades”.
d) “No tiene tanta importancia”, “ni tú ni yo”, “vamos a dejar el tema aquí”.

3. Cuando le explicas a otras personas los problemas o conflictos que has tenido con tu pareja, tú...
a) Necesito más de media hora, tengo que dar detalles y quizás exagero un poco, pero no lo puedo evitar porque estoy muy dolido.
b) Soy breve y contundente en mi valoración sobre mi pareja y la discusión que hemos tenido, porque la situación para mí está más que clara y no hace falta darle más vueltas.
c) No suelo compartir estos temas con mis amigos, y si lo hago no le doy mucha importancia, enseguida digo que ya lo hemos solucionado.
d) Lo explico como una anécdota y casi siempre acabamos riéndonos todos.

4. Ante la impotencia de ver que no puedes hacer entrar en razón a tu pareja sobre algún tema, tú...
a) Desearía morirme o desaparecer, irme lejos y dejarlo todo atrás.
b) Me entran ganas de darle un bofetón, a ver si espabila.
c) Me bloqueo, pierdo casi el sentido del tiempo, enmudezco, no me sale decir nada.
d) Allá ella, yo ya le he dado mi opinión. A partir de ahí, que decida lo que quiera.

5. Después de una discusión, tú...
a) Nada de darlo por concluido, hay que insistir un poco más porque hay cosas que no pueden quedar así, aunque me lleve días.
b) Me distancio, no quiero que mi pareja me hable, necesito tiempo para calmarme y dejar que se acerque de nuevo a mí.
c) Necesito comprobar que mi pareja se encuentra bien y no está muy afectado, sino no me quedo del todo tranquilo.
d) A los 10 minutos se me ha olvidado, paso página enseguida.

6. En el momento de planificar con tu pareja alguna actividad de ocio o las vacaciones, tu actitud más común es:
a) Para qué proponer algo, nunca se me hace caso.
b) Siempre en función de nuestra economía, hay que ser realista.
c) Por lo general yo me adapto a lo que salga.
d) ¡Improvisemos un poco! No se puede tenerlo todo controlado.

7. Si tuvieras que elegir el estado de ánimo que sientes cuando te encuentras mal, dirías que es:
a) Depre, sin duda. Me pongo muy triste.
b) Un subidón. Necesito caminar o ir al gimnasio para quemar adrenalina.
c) Miedo. De repente me siento inseguro y culpable en todo: trabajo, amigos, pareja...
d) De agobio, todo el mundo me molesta y necesito un finde para mí solo.

8. Cuál crees que es el dicho que mejor te define:
a) “Piensa mal y acertarás”.
b) “Genio y figura hasta la sepultura”.
c) “Para servirle a Dios y a usted”.
d) “Dos no discuten si uno no quiere”.

Fíjate si has obtenido mayoría de respuestas “a”, “b”, “c” o “d”. Seguidamente, busca la descripción de la opción de respuesta más elegida.En el caso de que hayas obtenido un empate entre las 4 opciones de respuesta, lee la descripción de cada una de ellas, especialmente la opción “d” ya que seguramente tienes capacidad para desarrollarla aún más y minimizar las otras opciones. En el caso de que hayas obtenido un empate entre dos opciones de respuesta, lee la descripción de ambas ya que las combinas en tu comunicación con tu pareja. En el caso de que una de ellas sea la opción de respuesta “d”, presta especial atención a su descripción ya que tienes capacidad para desarrollarla aún más destacándola por encima de la otra opción de empate.

BUSCA TU PERFIL:
Mayoría A: Rol de VICTIMA: afrontas los problemas desde el victimismo, expresas a menudo que no te sientes comprendido y/o respetado por tu pareja, te encanta hacer listas de agravios, todos con el mismo fondo: “qué malo que eres conmigo y cómo padezco yo por tu culpa”. Pero siempre acabas cediendo, y no por ser buena persona (como sueles creer), sino porque eres el que tienes más dependencia en la relación. *3 consejos para ti: sé más positivo/a; no tengas tanto miedo del rechazo; sé más egoísta.

Mayoría B: Rol de PERSEGUIDOR: eres súper crítico, te encanta corregir al otro como si fueras un sabe-lo-todo. Cuando dialogas tus argumentos se pueden resumir en: “qué poco sabes, suerte tienes de mí”. No cederás hasta que no te den la razón, lo tuyo es la cabezonería y puedes mostrarte muy duro y frío en las discusiones, propinando algunos golpes bajos en tus comentarios. Los que te conocen suelen decir que tienes dos caras: muy amigo/a y encantador/a, pero en ocasiones (de casa para adentro) un pequeño dictador/a.
*3 consejos para ti: recordar que la vida no es una batalla continua que hay que ganar; recordar que nadie rivaliza contigo, así que relájate y disfruta del viaje de la vida; recordar que en pareja la diferencia y el desacuerdo está permitido.

Mayoría C: Rol de SALVADOR: no te gusta el conflicto ni las discusiones, te pasas el tiempo calmando al otro y disculpándose: “no te lo tomes así, verás como no es para tanto, perdóname, me hago cargo yo de la situación, yo lo arreglaré, ¿estás bien?, ¿seguro que estás bien?, ¿seguro, seguro?”. O sea, sueles ser bastante pasadito/ a y has hecho de la angustia una compañera habitual. No sueles tener grandes aspiraciones, porque te bloqueas enseguida cuando ves que debes contar con los demás, no sea caso que les molestes demasiado. A veces te levantas con unas ganas de llorar que no te explicas y a media tarde ya te falta la respiración. Dependes del bienestar ajeno, algo que ya has intuido que es imposible controlar, aunque te empeñas en hacerlo. *3 consejos para ti: cuidado con la culpabilidad, es una trampa que te pones; permite el conflicto, es la oportunidad que necesita el otro para crecer; deja de juzgarte continuamente o no pasarán las ganas de llorar.

Mayoría D: Rol del AMIGO: te importa lo que le pase al otro, pero no te involucras totalmente, cosa que alguien puede confundir con indiferencia, pero no es así. Tú no aspiras solucionarle los problemas al otro, sino comprenderle y a apoyarle en lo que necesite. Tienes una gran complicidad con tu pareja, eso para ti es indispensable, si no, no hay pareja. Necesitas sentir cierto grado de libertad personal, tener tu espacio y esperar que tu pareja te lo permita le agrade o no (eso es su problema), tú también le animas a que cultive su individualismo (pero si lo hace o no, también es su problema). Juntos pero no revueltos es el lema de tu convivencia en pareja, y las discusiones, las que sean necesarias pero breves, que en la vida hay cosas mejores que hacer. *3 consejos para ti: bueno, para ti sólo uno: de vez en cuando, recuérdale a tu pareja que no es un amigo/a más y que en tu vida social ella tiene un lugar destacado.

NOTA: Estos roles no tienen por qué ser siempre fijos en cada persona: cada cual puede adoptar uno según el tema de discusión o la circunstancia, aunque generalmente todos tendemos hacia un rol favorito...

COMBINACIONES: cuando discutís, este es el resultado...
A. Salvador+Salvador: no hay discusión o bien es mínima, enseguida os perdonáis y ocultáis los conflictos, que quedan por resolver a veces para toda la vida.
B. Salvador+Perseguidor: la discusión durará poco pero es posible que haya gritos porque al perseguidor le encanta hacerse oír y en ocasiones que le perdonen la vida tan rápidamente le molesta, porque no ha tenido oportunidad de quejarse todo lo que quisiera.
C. Salvador+Víctima: la discusión no será con gritos, sino de esas políticamente correctas pero que pueden durar días, porque a la víctima le dura el rencor y alarga su discurso victimista y lagrimero todo lo que puede... Y el otro que es un santo al final ya no sabe qué decir.
D. Perseguidor+Víctima: Discusión con gritos y lloros, con chantajes emocionales e insultos graves. La pareja tarda en recuperarse algunos días. Es posible que lleguen a algún acuerdo, pero si tienen muchas de estas discusiones, la relación se gastará pronto, y acumularán resentimiento en sus respectivas listas negras.
E. Perseguidor+Perseguidor: rayos y truenos, esta pareja no durará más de tres discusiones.La guerra será tan fuerte que no llegarán a ningún acuerdo fácilmente y alguno tendrá que marchar de casa “temporalmente” hasta que venga el olvido... o el sexo, que a ellos siempre les funciona como terapia.
F. Víctima+Víctima: otra discusión suave y sin gritos, pero con lloros y rencores que duran días. Esta pareja acaba siendo buenos amigos o compañeros de piso, generalmente sin derecho a roce (se les fue las ganas rápidamente). ¡Y es que competir por quién lo ha pasado peor es muy duro!
G. Amigo + los otros roles: el amigo es muy sabio y sabe respetar sin agobiar al otro. Solo exige una condición: que la cosa pueda que en “tablas”: ni tú ni yo, o mejor dicho, tú y yo ganamos algo, pero tú y yo tenemos que ceder también en algo, ambos tenemos razón y existen múltiples verdades. El problema será si el otro miembro de la pareja sabrá aceptar este empate...

9 comentarios:

  1. Uf, hoy me voy con la música a otra parte :P
    Besos

    ResponderEliminar
  2. Yo tengo rol de loco.
    Cada vez más.

    Ermitaño y loco.
    A mucha honra.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  3. Mi rol es variable e infinito e impredecible, vaya que estoy más pallá que pacá.

    ResponderEliminar
  4. ¿No sería más fácil vivir dejándose llevar?

    Saludos,

    J.

    ResponderEliminar
  5. Rol de salvador...

    En fin, voy a salvar al mundo, luego vuelvo :)

    Besos

    ResponderEliminar
  6. Me quedo con el de amigo, es el que más me gusta. Pero vete a saber lo que saldría si hiciera el test.
    Besos, Chaly.

    ResponderEliminar