El quechua, el idioma del Imperio Incaico, tiene casi 500 años de contacto con
el castellano, por lo que es lógico que se hayan producido influencias entre
ambos idiomas. Lo más destacado, además de las formas de hablar quechua que
permean el habla castellana de los bilingües, son los préstamos de palabras.
Así, en el quechua de uso diario se incluyen muchas palabras de origen
castellano, y lo mismo se da al contrario, pero a veces esto último no es tan
conocido.
Aparte de las palabras
que designan a la gran cantidad de animales y productos agrícolas que se incorporaron al acervo castellano con ligeras modificaciones,
tales como llama, guanaco o vicuña, sólo para citar a los camélidos
americanos, papa, quinua, palta o lúcuma, si hablamos de productos agrícolas,
tenemos esas otras palabras que a veces ni imaginamos que proceden del
quechua.
A continuación una lista
informal y no exhaustiva.
Esta palabra, que
proviene del quechua kancha,
se usa prácticamente en toda la América de habla castellana para designar al
sitio donde se realiza un partido, preferentemente de fútbol. Pero también
tiene otras acepciones más locales. Por ejemplo al maíz tostado también se le
llama cancha o canchita… ummmm.
El uso de esta palabra es
casi global, pero la RAE no la reconoce como de origen quechua. Sin
embargo el vocablo quechua punchu significa lo mismo así que salvo mejor
opinión nosotros la consideramos en esta lista. Tiene además un uso diferente
en una frase común en algunos países de Sudamérica: “No dejarse pisar el
poncho” o similares, que se usan para indicar que alguien no se deje humillar o
intimidar.
“El cura” se usa para
llamar coloquialmente a un sacerdote. Su uso es casi común a toda la Sudamérica
de habla castellana, siendo su origen la palabra quechua kuraka o kuraq que se
usaba para designar al jefe de una comunidad en el Imperio Incaico. La frase
“hijo de cura” que en algún momento fue considerada insulto por referirse a la
condición de bastardía, se usa en algunas partes como sarcasmo para hacer notar
que alguien está siendo pasado por alto.
Prácticamente en todo el
mundo se usa “gaucho”, el vaquero de las pampas argentinas, como sinónimo de
argentino. Su origen es muy probable que sea la palabra quechua wakcha, que
significa huérfano, y que también da origen al peruanismo “huacho” que
significa solitario.
Del quechua muruch'u, que
designa a una variedad de maíz muy duro, su acepción más común es “persona de
piel oscura”. En algunos países se usa para personas de piel blanca pero de
cabello negro. Por extensión también se aplica a animales de piel negra. En
Ecuador “morocho” es una deliciosa bebida espesa.
En varios países
sudamericanos chacra se usa para lo que en otras partes se usa granja, una casa
con campos de cultivo en el área rural. Proviene del quechua chakra o chajra,
que significa una pequeña partición de tierra cultivable. En jerga peruana algo
chacra es algo mal hecho.
Esa prenda de moda que
algunos artistas usan para darse un toque exótico es de origen peruano, y por
supuesto su nombre es quechua. Deriva del vocablo ch'ullu que sirve para llamar
a un gorro con orejeras tejido en lana, tradicionalmente de alpaca.
En esta parte del mundo y
en España (incluso en el catalán), una tienda de campaña es también una carpa,
incluso el gran toldo de un circo es una carpa. Karpa es la voz quechua que da
origen a esta palabra. Hay un uso muy coloquial también para esta palabra en
algunos países de Sudamérica: “estar carpa”, pero no me pregunten su
significado pues estamos en horario de protección a menores.
Esta palabrita que deriva
del quechua puchu se usa generalmente para designar las colillas de cigarrillos
o los cigarros a medio fumar, sin embargo por costumbre también se usa en
algunos países para el cigarrillo completo. En otros, usada como parte de la
frase “sobre el pucho” significa “al toque”, “al tiro”, esteee ¿cómo era? ya.
Originalmente usada para
nombrar a los excrementos de las aves marinas usadas como abono, del quechua
wánu, por extensión se usa también para excrementos de otros animales. Su uso
está más extendido de lo que se podría pensar.
Go quechua go!
Gracias por culturizarme.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muy interesante.
ResponderEliminarEs lo que tiene cuando conviven dos lenguas, la transferencia de vocablos es inevitable. Y hoy en día con la globalización, ni qué decir.
Besos.
Algo más por lo que admirar al idioma Quechua.
ResponderEliminarMe gusta el quechua!!!
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