sábado, 6 de febrero de 2021

0500: La historia de la Peta.

 

Cierta madrugada, venía un buen hombre por la carretera en su Peta del 67. Y de repente, la Peta se le apago.

-Hijo de tu reputa Peta madre…

Dijo el tipo. Se orilló para ver si lo podía hacer arrancar de nuevo, pero nada, por más de que lo pateó y la insultó, la Peta no respondía. Aburrido, se sienta en el cofre a esperar por ayuda. En eso apareció un Mercedes Benz Compressor a 170 km/h. y vio al afligido hombre con su destartalado auto y se da un amarrón de microbusero, haciendo gala de sus súper frenos, quemando llanta, para y se tira de reversa. Se ofrece a remolcar a la Peta. El dueño de la Petita apenado por el lujoso y potente auto, pero aburrido de no poder arrancar su Escarabajo, aceptó enseguida, haciéndole la siguiente recomendación:

-Pero nomás no le pises fuerte, porque esta madre se va a deshacer. Mmmm, bueno mejor sí písale, y cuando sienta que esta chingadera se esté desmadrando te hago el cambio de luces pa`que le bajes

El del Mercedes le contestó:

—Camarada no hay pedo, con este puto motor, remolco hasta un trailer.

El Mercedes comienza a remolcarlo sin problemas, sin siquiera sentir a la pobre Petita. Apenas llegó a 80, luego a 100 km/h y al dueño de la Peta sentía que se le caían los calzones, les temblaba todo a los dos. Ya para ese entonces, le hace el cambio de luces para que le bajara de huevos.

De repente y de la nada, aparece un Porsche Carrera, emparejándose, acelerando a fondo, retando al Mercedes... Y claro, como buen pinche cabrón, no se iba a dejar intimidar por otro pendejo y comienza: 120, 140, 160, 190, 210, 240, 260 km/h

El dueño de la Peta venía cagado del susto, parecía semáforo el pendejo verde-amarillo-rojo, estaba que se moría… y la puta Peta andaba en las mismas, parecía licuadora sin tapa, dando vueltas de aquí para allá, se iba deshaciendo en cargos como un transbordador entrando a la tierra, se estaba desarmando esa madre…

Y el pobre hombre, por más que hacia cambios de luces, nada… le tocaba el claxon y nada...

Ahhh, pero el Mercedes y el Porsche, como chamacas locas en fiesta de cumpleaños…

En eso andaban cuando pasan por un puesto de la Policía de Caminos, en el que el radar registró impresionantes 270 km/h.

Al policía hasta le voló la gorra y los lentes, de inmediato avisa por radio al próximo puesto:

-¡Atención!, ¡Atención! Mercedes Gris Plata y un Porsche Negro a más de 270 km/h en la autopista... y, muchachos... se los juro por mi vieja... por mis hijos... por mi madre... bueno, lo juro hasta por mis huevos que tanto quiero... que atrás de ellos viene una pinché Peta pedorra haciéndoles cambio de luces para que lo dejen pasar…

3 comentarios:

  1. Reina por un día, la Peta.
    Un abrazo.

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  2. Me has hecho sonreir desde m cama recien me levanto un brazo

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  3. Aunque pequeña la Peta se hizo famosa por un momento.
    Muy gracioso
    Un abrazo Chaly
    Puri

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