Si tú puedes lograr que un copuchento se ría (siempre que no se ría de ti, claro), es que está encantado y querrá verte otra vez. De todas maneras, como todos los copuchentos saben, las prójimas encuentran divertidas cosas que los prójimos no. Es fácil usar mal el humor con ellos y asustarlos u ofenderlos, pero teniendo esto en cuenta, he aquí una relación de las cosas QUÉ se pueden hacer y de las QUÉ no se deben hacer para flirtear con glamour.
No es una buena idea hacer bromas sobre su apariencia
A no ser que tú sepas con seguridad que la broma será recibida de forma positiva. Por ejemplo si dices algo como “¡Qué culo tan grande tienes! ¡Me encantan los prójimos bien armados!”, algunos se van a sentir muy ofendidos, como cualquier otra prójima de la perfección hispanoamericana.
No hagas bromas sobre la violencia
A no ser que estés absolutamente segura de que a él le gustan, aunque lo más probable es que no. Una vez más, la interrelación entre prójimos y prójimas es diferente. Entre las féminas, las bromas sobre la violencia se consideran divertidas. Si usted le pide una cierta información a otra, y ésta le contesta “Te la daría, pero luego tendría que masturbarte”, seguramente usted lo encontraría divertido, pero para un prójimo no lo sería en absoluto. La mayoría de las veces los copuchentos entienden las bromas sobre violencia como amenazas, así que no las hagas.
No haga bromas sobre sí misma.
Esto es muy importante. Recuerde lo que hemos dicho: cuando un copuchento la conoce, decide qué lugar ocupará usted en su vida. ¿Será su amante? ¿Una amiga? ¿Alguien a quien criar? El intenta descifrar qué nivel de respeto asignarle, y una forma de hacerlo es observar cómo te tratas tú a ti misma. Si tú haces bromas a tu propia costa, él sabrá que no vale la pena perder tiempo contigo.
Haga «malas interpretaciones creativas»
Al acercarse a un prójimo, tiene que estar alerta y tener los ojos bien abiertos. Busque los detalles de su apariencia o de lo que está haciendo sobre los que pueda hacer bromas inocentes. Intente que su interpretación equivocada sea un cumplido para él. Por ejemplo, considerar al tipejo del aparcamiento como «el efebo que guarda los coches» sería más efectivo que considerarlo como un puñetero con suerte. La primera interpretación es una broma y la segunda es un insulto. Ten presente la diferencia.
Sonría y diga «hola»
Tu expresión es una parte importante de tu comportamiento. Cuando te acerques a un copuchento para coquetear con él, es mejor estar relajada y sonreír, establecer contacto visual y decir «hola». Demasiadas, intentan flirtear de forma brusca, porque no les gusta tener que hacerlo, o porque no están de buen humor. Ni actúan ni hablan de forma calmada. Cuando tú te sientes suavizada y te acercas, él lo nota. Pregúntales sobre cosas que conocen. Las preguntas relacionadas con el trabajo son adecuadas, como también lo son las que hacen referencia a la apariencia personal. Por ejemplo, si él lleva un collar fuera de lo corriente, una buena pregunta sería « ¡Qué bonito collar llevas! ¿Eres narcotraficante?»
Hágales preguntas
Es bueno hacer preguntas, ya que lo que tú buscas es averiguar cosas sobre él. No se trata de hacer un interrogatorio, sino de hacer preguntas sobre cuestiones que a él le interesan. Si lleva un condón en la mano, por ejemplo, pregúntele algo así: « ¡Esa cosa es muy bonita! ¿Te gustan las fraganciosas, o sólo las de colores?» O haga una pregunta como « ¿Por qué crees tú que a las féminas les gustan los preservativos?» Con este tipo de preguntas, tú mantienes una conversación con él sobre sus gustos y sentimientos, que es el tipo de conversación que puede dar lugar a una situación más íntima después.
Describa situaciones agradables cuando estas con un copuchento
Con toda seguridad tú has tenido que soportar a alguna amiga describiendo hasta la náusea una situación desagradable, así que recordarás que al final tu amiga logró que tú también te sintieras mal. Esto pasa porque la descripción de un sentimiento o una sensación se transforman al llegar al que lo escucha, quien acaba experimentando dicho sentimiento o teniendo dicha sensación. Para flirtear con éxito, aprovecha de este principio, pero al revés. Lo que tú tienes que hacer es describir, con todo lujo de detalles, los sentimientos que quieres que él tenga (sexo, atracción, deseo), porque al hacerlo así, él comenzará a tener dichos sentimientos.
El principio es muy sencillo: cuando alguien describe algo, tenemos que imaginarlo para poder comprender lo que la otra persona nos está diciendo. Esto mismo es lo que sucede cuando tú le describes un sentimiento a él, aunque hasta dónde él podrá imaginarlo dependerá de la buena descripción que tú hagas.
El Kama Sutra es una maravillosa herramienta para aprender a hacer descripciones hermosas y románticas; por algo, la casi totalidad de las posiciones son sobre el amor. En los videos eróticos y en la telenovela encontraras una corriente inacabable de descripciones que te permitirán aprender a hablar con ese toque de lascivia que los copuchentos adoran.
Tenga confianza en sus bromas
Uno de los peores errores que cometen las féminas al flirtear es que esperan que los copuchentos se sientan cómodos con la situación antes de que ellas mismas se sientan así. Volvemos a repetírtelo: cuando tú conoces a un prójimo, lo primero que él hace es pensar si tú eres una tipa de fiar o no. Si tú actúas de forma dubitativa o asustada, él actuará del mismo modo, así que tu forma de actuar tiene que demostrar la certeza de que no representas ningún peligro para él y que tu flirteo es divertido y relajado para ambos.
Se romántica con humor
No basta con ser divertida, también tienes que hacerle saber a él que te interesa y que lo encuentras atractivo. Le estás diciendo, indirectamente, que así es como lo ves y que lo consideras como algo más que a un amigo. Al hacer esto, lo obligas a colocarse en una categoría, la de amigo o amante ocasional. Si él te sigue la corriente después de un comentario así, ya sabe que él te considera como una posible candidata a su cama. Tú también puede hacer lo mismo, si muestras tu interés sensiblero cuando flirteas con un copuchento.
voy anotando todo!!! mas vale que me sirva Chaly!!!
ResponderEliminar:-)
abrazos
Ahora si la clase estuvo larga, hay que hacer anotaciones para no olvidar.
ResponderEliminarSaludos
Hola Chaly, buenas tardes.
ResponderEliminarMi nueva entrada está dedicada a vosotros, a mis seguidores. Me gustaría compartirla contigo porque eres partidaria de ella, y por ello te dejo aquí el link, ¿ok? Que la disfrutes.
http://insolitadimension.blogspot.com.es/2013/02/carta-de-agradecimiento.html
Un cálido abrazo y feliz día.