386: SIN RUMBO FIJO

--- Sin embargo, me tienes acá, sin saber qué hacer, dolida, terriblemente dolida. Cómo puedes venir sin vísperas y decirme que te vas, que vuelves con tu esposa, que extrañas tu ciudad, tus amigos a tu familia, en fin un montón de cosas de las cuales no conozco ni se si es verdad. ¿Por qué no me dices que ya no me quieres? ¿Por qué no me dices que jamás dejaste de amar a tu esposa? ¿Dime la verdad? Basta de excusas, ¡¡quiero saber la verdad!!
--- La verdad es siempre dolorosa, por eso se la disfraza de mentiras.
--- No me importa: ¡¡quiero la verdad!!
--- La policía política de mi país se ha enterado que me encuentro en esta ciudad y me han informado, que vienen a llevarme de vuelta…
--- Entonces… huye mi amor…huye….
--- ¿Se la creyó?
--- Completamente, esa es la mejor mentira que me has enseñado, ¿y ahora a dónde nos dirigimos?
--- A Francia, hermano, dicen que allí hay mucho para aprender…