¿Qué significa tratarlo como un perro?
Piénsalo reflexivamente, si tienes mascotas, seguramente las tratas con mucho amor y te aseguras de que todas sus necesidades siempre estén cubiertas.
¿Haces lo mismo con tu esposo?
Al volver a casa, saludas a tu mascota con una sonrisa alegre, no importa si pasaste un mal día en el trabajo o estuviste atorada en el tráfico por dos horas.
¿Haces lo mismo con tu esposo?
Si criaste un cachorro desde pequeño, sabrás que logran aprender más con agasajos y alabanza cuando hacen algo bien, que con reproches y regaños cuando hacen algo mal.
¿Aplicas el mismo método con tu esposo?
Si tu cachorro te muestra una de sus hazañas, aun si la ves todos los días, lo celebras con entusiasmo y hasta le hablas como bebé.
¿Celebras igual los esfuerzos diarios de tu esposo?
A tu perro le hablas con instrucciones claras: “ven”, “trae la pelota”, “siéntate”, “come” etc. No le das explicaciones innecesarias ni asumes que ya debe saber lo que quieres que haga porque es tu cachorro.
¿Comunicas con claridad lo que quieres de tu marido?
Y finalmente, si tu mascota hace algo indebido, ¿lo mantienes en tu mente como una carta bajo la manga para recordárselo cada vez que comete otro error?
¡Seguramente no!
¿Ves la diferencia? ¡Tratar a tú marido como perro no estaría nada mal!
Ahora, no se trata de que apliques exactamente el mismo trato a tu marido, ni que intentes darle palmadas en la espalda y decirle que ha sido un buen chico, más bien que canalices un poco de la comprensión, alegría y sobre todo amor incondicional que reciben tus mascotas, hacia tu marido.
Gustavo no se limita solamente a la comparación de tratos entre tu perro y tu marido, sino que también habla de otras situaciones muy reales en donde las mujeres sienten la necesidad de ser más amables y corteses con personas exteriores al hogar, como los jefes, empleados, doctores, personas de servicio etcétera.
¿Puedes pensar en alguien a quien crees que trates mejor que a tu marido? Si ese es el caso, retoma conciencia y piensa que fue a tu esposo a quien le prometiste amor y comprensión, hasta que la muerte los separe.
Jajajajajajaa
ResponderEliminarTambién hay que sacarle a pasear para que haga sus necesidades?
Hasta que la muerte... joder....
ResponderEliminarSaludos.
¿Vale como al perro del vecino?
ResponderEliminarTomo nota para el próximo!!jaaaaa
ResponderEliminarQue el último huyó por que le trataba como un perro
Guauuuuuuuu
Digo
Auuuuuuu
Pshhh
Es broma
Huí yo... creo
Ops
Besitos
Tendrá que ser reciproco, ¿no?
ResponderEliminarY lo de la muerte se lo inventó la Iglesia.
Besos.
No está mal, y coincido con Celia Segui: tendría que ser recíproco.
ResponderEliminarSaludos.
Quiero ser feliz yo!!!!
ResponderEliminarY por lo tanto además de recíproco, deberán obedecer, poner atención y hacer trucos???? trucos nuevos también!
ResponderEliminarjejeje
besos Chaly =))))
Hay una canción ...
ResponderEliminarSi me espera bajo la lluvia por horas se vale decirle estas mojado apestas ya no te quiero
D:
Los perros son perros y tu esposo debe ser tu amigo y compañero. Hay una diferencia abismal
ResponderEliminarBesos
Pobres perros...
ResponderEliminar:P
Bss, Chaly.