domingo, 5 de enero de 2020

0413: i reflexión


* Solo sabiendo callar, es como se aprende a escuchar; oyendo es como se aprender a hablar; y cuando sabemos hablar, es cuando aprendemos a pensar, y eso es permitir que el otro también pueda hablar.

* Si tienes la tendencia a exagerar tus alegrías, como lo haces con tus penas, tus problemas perderían su importancia.

* Las Mentes brillantes, siempre recurren a las ideas. Las Mentes comunes hablan de banalidades. Las Mentes mediocres, solo hablan criticando a los demás.

* Algunos tienen y apenas les alcanza. Otros podrían, pero no tienen. Otros ni tienen ni pueden. Y aquellos que tienen y pueden, deben aprender a dar.

* Es muy triste en esta vida, que cuando uno tiene razón, pues, nadie te escucha. Pero, si cuando uno está equivocado, nadie te olvida, y por siempre te critican.

* Ser profesional, no es aquél que solo obtiene un título, sino aquél que sabe valorar a los demás por lo que son, es un Sabio.

5 comentarios:

  1. “El que no sabe que no sabe, es un necio; apártate de él. El que sabe que no sabe, es sencillo; instrúyelo. El que no sabe que sabe está dormido; despiértalo. El que sabe que sabe, es sabio; síguelo” (Proverbio árabe).
    “Quien no quiere razonar es un fanático, quien no sabe razonar es un tonto y quien no se atreve a razonar es un esclavo” (William Henry).

    Un abrazo.

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  2. Coincido en todo o en mucho.
    Justo hoy estuve reflexionando sobre el primer punto, y sus múltiples vértices... por ejemplo, hoy pensaba en las personas que hablan poco, y siempre son las que escuchan, pero cuando de pronto son escuchadas no paran de hablar. Y así... ha sido el tema del día.
    Un abrazo.

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  3. Entre Macondo y tú habéis hecho una noche filosófica.

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  4. Me gustan esas ireflexiones, las suscribo prácticamente en su totalidad.

    Besos.

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