El amante rezongón.
La persona rezongona se alimenta de la patología de otra persona. El marido rezongón conserva la resistencia de su esposa a las relaciones sexuales por medio de sus refunfuños y quejas acerca de su falta de deseos.
Ella necesita que él refunfuñe o sea negativo hacia ella de modo que ella no quiera tener contacto sexual con él, y él necesita que ella se resista a las relaciones sexuales para poder refunfuñar y quejarse. Es casi una danza.
Tú puedes reconocer el patrón que se ha establecido entre ambos. Cada uno hace su parte y bien lo sabe. Casi no sabrías cómo actuar sin la provocación, queja o tristeza constantes que parece interponerse entre los dos.
Es que hay algunos hombres que no pueden vivir sin su hija de puta y algunas mujeres sin su rezongón.
no, que flojera así no funciona... definitiva yo no rezongo y mucho menos quiero una pareja enojona nonono que flojera asi quien no se apaga?
ResponderEliminarSi hay algo que no soporto, son los gruñones. Te despiertas y ver su cara de gruñón, ah!, no...Digo adios!...
ResponderEliminarNo tengo paciencia para eso!...