Una moza de la pensión me sirvió una flor de calabaza, acompañada de su flor de jamaica. En la nochecita fui a buscarla y la encontré rezando a su flor de la Pasión. Después de muchas palabras ella cedió y me entrego su flor de mayo.
Más me advirtió de los celos de su novio y me dijo que huyera que no quería nada con flor de muertos. Pero también me dijo que volviese para la flor de Nochebuena, porque no quería ser flor de un día.
Un flor de romance... o un romance en flor.
ResponderEliminarBesos, Chaly.