212: El espíritu de la melodía infernal le rozaba con un vientecillo frío y apestoso, se le metía por los calzones y le dejaba el culo encogido.

En un coloquio con los camaradas discutimos este tópico, quedando casi todos de acuerdo que la fémina perfecta, aquella en la que depositamos nuestra confianza y esperma deberá reunir como mínimo estas nueve cualidades:

1. Sentido del humor.

2. Muestras públicas de afecto. ¿A quién no le agrada que lo manoseen en público? A nadie, le desagrada, que su pareja muestre al mundo que ella no puede vivir sin toquetearlo ni un instante de su vida.

3. Que valore nuestras cualidades y no solo las que cumplimos en la cama, si no las otras las intangibles, aquellas que ni siquiera nosotros sospechábamos que las teníamos.

4. Que sea amable con nuestros amigos, sin caer en la coquetería. Nos agrada que nuestra pareja nos permita salir de parranda, de excursión o en fin cualquier cosa que hacemos los hombres cuando estamos en patota y nos dedicamos al deporte del miembro.

5. Queremos que nuestra prójima sea sociable con otros hombres, sin que sea descaradamente coqueta. Los hombres quieren tener por pareja a una mujer que irradie encanto, que haga decir: “Ella es interesante, atractiva e inteligente y cómo diablos se enganchó con éste”

6. Que suavice nuestro ánimo. Nadie está inmune a los cambios de ánimo y acá una palabra, un gesto, una caricia nos ayudaría en gran manera a superar esos momentos que quisiéramos todo mandarlo al carajo.

7. Que nos enseñe que es lo que le gusta.

8. Nos agrada que nos lo pidan. Estamos cansados de ser nosotros los que siempre proponemos y que hermoso será el momento cuando ella diga: ¡no sales de la casa si antes no me haces trapo!

9. Que nos defienda y nos apoye.

Como ven acá no estamos pidiendo nada del otro mundo, sino simplemente nueve actitudes que harán más llevadero el viaje, al cual nos hemos embarcado, muchas veces sin mirar dos veces a la compañera de viaje.