sábado, 21 de noviembre de 2015
594: EL ANIVERSARIO
Cacho llego aquella noche a su casa sin sospechar lo que le esperaba. – ¡Cacho, te olvidaste otra vez! – ¿De qué vieja? – ¡Hoy cumplimos 30 años de casados! – ¡Pe..pe..pero como me voy a olvidar de eso! – Quiero que me lleves a cenar a ver un buen espectáculo y a bailar. – Justamente eso era lo que tenía planeado. – Bueno quiero que me lleves al Pigalle. – ¡Quéeeeee! ¡Estás loca! ¡Ése es un antro! – ¡Cacho, quiero que me lleves ahí! – ¡Vamos a cualquier otro lado, allí no bebé! – Vamos al Pigalle Cacho… Y fueron. Apenas llegaron el muchacho que estacionaba los autos dijo – ¡Buenas, como le va caballero! ¡Qué bueno verlo otra vez! La mujer saltó sorprendida – ¿Qué dice este chico? ¡Dijo que qué bueno verte otra vez! ¿Vos viniste aquí alguna vez? – ¿Yo? ¿Pero vos estás loca? ¿A este piringundín? Le dicen a todos lo mismo, en estos lugares son así. Aparece el portero – ¡Señor Petrelli, que gusto tenerlo por acá! – ¡Te dijo señor Petrelli, te conoce! – Ehhh… y como no me va a conocer si este tipo trabaja en el edificio de mi oficina. Es el electricista del edificio. Los recibe el maitre – Monsieur Petrelli . La mejor mesa como siempre, ¿verdad? – ¿Este francés también es electricista en tu oficina? ¡Cacho, yo te voy a matar! – No ehhh, este francés me conoce porque es el que me vendió los pasajes en Air France el año pasado cuando fui a Europa a la Convención, ¿te acordás? – Cacho vos me estás… En ese momento aparece la vendedora de cigarrillos. – Cachiiiiiito ¿Te doy tu habanito? La cigarrera se pone el habano entre las tetas. – ¡Méteme la manito cachitoooo, meteme la manito y sacá tu habanito! La mujer de cacho está a punto de matarlo. En ese momento se pagan las luces. Cacho y su mujer se sientan y empieza el espectáculo. Aparece una mujer súper sensacional que empieza a hacer un strip-tease espeluznante. Cuando se queda solo con la bombachita, se acerca a la mesa de cacho y mimosísima pregunta a toda la concurrencia. – ¿Y ahora quién me va a sacar la tanguita? Todos los presentes gritan a coro – ¡Se siente, se siente, Cachito con los dientes! ¡Se siente, se siente Cachito con los dientes! La mujer de Cacho no aguanta más y sale corriendo. Se mete en un taxi. Cacho la sigue. Sube al taxi también. La mujer empieza a pegarle y quiere arrojarlo afuera. Lo insulta a más no poder, al tiempo que se saca un zapato y empieza a pegarle en la cabeza. El Cacho se ataja como puede. – ¡La puta que te reparió Cacho, malparido de mierda, hijo de mil puta! En ese momento el taxista se da vuelta y dice: – Mire que hemos llevado trolas, don Cacho, ¡pero loca como esta vieja puta ninguna, eh!
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Imaginativo relato. Besos.
ResponderEliminarYA conocía esta historia.Jajajajajajaja
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