La palabra Mansplaining es un neologismo anglófono basado en la composición de las palabras hombre y explicar, que se define como "explicar algo a alguien, generalmente un hombre a una mujer, de una manera condescendiente.
Hoy los más comunes.
EL BIÓLOGO
Da igual de qué tema trate la charla: techo de cristal, agresiones, tareas domésticas... este tipo de mansplainer lo justificará todo con la biología. Si ellas son agredidas sexualmente es porque el impulso sexual que biológicamente tiene el hombre es más fuerte que él. Suelen apostillar que lo mejor para una mujer es ir tapada y no como una puta. Por supuesto, acto seguido se sacan a sí mismos de la ecuación, entiéndelos, no es que hablen de ellos, sino de los demás. Si estás debatiendo sobre que las mujeres no ascienden tanto como los hombres en el trabajo, el mansplainer te dirá que eso es porque ellas, biológicamente, están más preparadas tanto para procrear como para cuidar niños.
EL NEGACIONISTA
Con este tipo de mansplainer tienes que partir de la base de que el machismo no existe. El machismo es eso que pasa en otros países, como México o España, donde amablemente te mandará a ir a protestar, si tan implicada dices que estás con la igualdad de género. Seguramente él te dirá que también quiere la igualdad. No le hables de violaciones o de feminicidios: no son lo suficiente numerosos como en otros países, por lo que no puedes quejarte. De hecho, debes dar las gracias, porque podría ser peor.
LA VÍCTIMA
Este tipo de mansplainer te explicará a ti por qué tus denuncias no son justas y además tienes un doble rasero a la hora de defender el tema. Aviso: tienen llanto para cualquier tema. Si tú hablas de violaciones te dirá que en las cárceles, a quien se viola, es siempre a hombres y no te ve quejarte ni poner el grito en el cielo. Por supuesto no te dice que los violadores son otros hombres, y si se lo dices, te dirá que qué más da quién sea el agresor, que lo que importa es la víctima y que no te importan porque son hombres. Al que realmente no es que le importe mucho es a él, que sólo se queja de estos casos cuando se topa con alguna feminista. Pero eso es lo de menos, el doble rasero lo tienes tú. Si el debate gira en torno a la presión social tú cuerpo, el mansplainer victimista te dirá que qué sabrás tú lo que es presión, que ya hasta han inventado cremas antiarrugas para ellos, y que la presión es, como mucho, la misma. Si habláis de agresiones sexuales, él te dirá que en 2008 le palparon el culo en un bar y que, en la última cena de Navidad de la empresa, una compañera del trabajo le pidió un polvacho y se sintió tremendamente incómodo. Da igual lo que tú le cuentes o las estadísticas oficiales que le saques a este mansplainer, lo suyo es siempre peor.
EL #EXISTEN
Muy complicado debatir con el mansplainer #Existen. Él ni niega la violencia de género ni los feminicidios. No niega nada ni lo explica ni le interesa lo que le estás contando, él viene a contarte su verdad y su verdad es que el Gobierno calla las increíbles estadísticas de hombres asesinados por sus esposas. Depende del mansplainer esta cifra varía de 30 a 300 muertes violentas anuales. Hay hasta asociaciones y plataformas de hombres que se dicen víctimas de la Ley de Violencia de Género y que defienden la existencia de los #Existen.
EL DOCENTE
El mansplainer docente te dice cómo tienes que llevar la lucha feminista. Te dirá que lo que tienen que hacer las mujeres es ser menos quejicas y menos víctimas, todo el día con la violencia de género en la boca, si a ti no te ha puesto la mano encima nadie nunca todavía, a qué viene todo este escándalo. Te dirá que lo mejor es no andar con malas compañías, y que a la mínima que a alguna les pase algo con algún loco, porque son eso, locos, pues entonces se denuncia a la Policía y sanseacabó. El docente te explicará que quedarse junto a un maltratador es también de estar muy tontaina y que tú, como feminista, no puedes dedicar tu vida a defender a locas de otros locos, que el feminismo en mucho más que eso.
EL TROLL
A este mansplainer no lo encuentras más que en redes sociales. No hay debate, sólo aportarán algún que otro "feminazi", "culona", "amargada". Algunos te harán un bonus track con la foto de sus genitales.
EL PSICOANALISTA
Cuando tú expongas tu punto de vista, él se limitará a diagnosticarte cosas o a explicarte por qué piensas así. Las más socorridas suelen ser que:
A) Algún novio te rompió el corazón y ahora odias a los hombres.
B) Eres lesbiana y lo sabes. O eres lesbiana pero aún no lo sabes. Elige.
C) Planeas una vaginocracia para vengarte de los hombres.
D) Estás muy gorda.
Es curioso porque, aunque algunas de las premisas de estos mansplainers son incompatibles entre sí, jamás los verás pelearse entre ellos. Es decir, un negacionista nunca le llevará la contra a un biólogo, ni un #existen ni llamará la atención a un troll.
Es lo que tiene la solidaridad de género.
Pues vaya panda. No me extraña que se lleven bien entre ellos. Por desgracia existen.
ResponderEliminarDesconociá esta palabra pero los ejemplos más comunes que pones no me cabe la menor duda de que "haberlos haylos" y desgraciadamente muy abundantes. Gracias por tu visita y comentario.Saludos cordiales
ResponderEliminarDespués de leer esto, cambio sin lugar a duda los huevos y pajaritos por neuronas.
ResponderEliminarBesos
Jajajaja, me parto contigo. Con ese "ganao" mejor ni hablar.
ResponderEliminarBesos
El hombre es un lobo para el hombre decía Hobbes...
ResponderEliminarEso antes, ahora es peor...
Saludos.
Esto es la jungla, me ha gustado tu exposición.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
O:
ResponderEliminarEl docente es pa matarlo.
ResponderEliminarLa verdad es que en todos hay que hacer una buena purga.
Mamá, que club más particular. Los psicoanalistas son bien hijos de puta, jaja.
ResponderEliminarSaludos.
De todo tiene que haber en la viña del Sr.
ResponderEliminarBss, Chaly.
Anna de poemias me paso tu blog pasare mas veces por aqui
ResponderEliminarhttp://anna-historias.blogspot.com.es/2016/08/los-pasos.html?m=1.
Besos