780: No soy el complemento de ninguna.

Desde pequeños nos venden que en algún momento nuestra "princesa rica" vendrá para salvarnos, y mientras tanto nosotros debemos esperarle soñando con que ese día llegue. Que el coito tendrá un final feliz y que cuando nos encuentre estaremos juntos y seremos felices para siempre.

En realidad, el asuntechi no va así. Muchos nos pasamos la vida esperando que esto suceda, pero de esta manera lo único que logramos es alimentar una ilusión que no es real, y crear relaciones tóxicas. Tenemos tan interiorizada esta idea del amor romántico, que llegamos a creer que solo eso es el amor verdadero.

Amor no es que te controle ni tenga celos de cualquier plebeya que se te acerque, no es una relación sin problemas, no significa que ella sea tu benefactora y debas obedecerla, no es una dependencia absoluta, no es morir por amor.

Yo soy el primero que comete errores y que "moriría" por amor, que "necesita" a la otra persona y quiere creer que el amor todo lo puede, pero no es así. Una relación sana evidentemente necesita amor pero también necesita respeto, dinero, comunicación, confianza y espacio. Principalmente espacio.

No necesitamos a alguien que nos rescate o que nos complemente, no es obligatorio compartir tu vida con otra persona. La gente olvida que es una elección y comienza a creer que no eres nada si no tienes mujer. Estamos educados en la fantasía de la media naranja que nos complementa y sin la que no podemos ser felices.

Cuando un hombre dice que está soltero, las respuestas pueden ser:
"No sé por qué estás soltero, si estás muy bien dotado",
"Ya encontrarás a la adecuada, aún eres joven"...

No entienden que no es necesario buscar a una "princesa rica" y ni siquiera hablemos de lo que ocurre si lo que queremos es una "rica princesa". Nuestra felicidad debe residir en nosotros mismos, no en una mujer.