784: Los tipos de mujeres más detestados (I)

A continuación, te presentamos la primera parte de los tipos de mujeres que más detestan los hombres. Algunas de estos perfiles no pasan más allá del anecdótico mal rato que suponen para sus parejas. Pero otros, pueden ir potenciándose con el tiempo y llevar a la relación a una verdadera tragedia:

LA BOND: Es aquel tipo de mujer que se cree espía y se desvive revisando el celular, el mail, los bolsillos de la chaqueta, la guantera del auto, el velador, y todo lo que sea necesario para confirmar un supuesto engaño de la pareja. En algunos casos, piden directamente las claves para revisar el email o las redes sociales del pololo o marido y frente a una negativa, lo acusan de estar escondiendo algo. En ciertas ocasiones, logran robarse las claves, porque su obsesión las convierte en verdaderas hackers. En casos extremos, crean perfiles de Facebook falsos, para coquetearle a la pareja y ponerla a prueba.

LA INFIEL: Es la versión femenina de un Don Juan: una mujer a la que le encantan los hombres, la pasión desenfrenada, la adrenalina de la conquista, la aventura y emoción del romance. Por esta razón, le es imposible ser fiel a sus parejas. Entre sus típicos comportamientos en Facebook, jamás publica su estado sentimental (aunque tenga novio o marido), sólo sube fotos de ella y muy rara vez junto a su pareja o familia, o tiene configurada la opción para que los demás no puedan ver a sus amigos, entre otras acciones. Suele organizar expediciones de “caza” con sus amigas, dentro o fuera del país.

LA PRINCESA: es el prototipo de mujer caprichosa, que pretende que siempre la complazcan. Exige ser el centro de atención, porque es una convencida de que se lo merece. Es exigente, da órdenes y cree que se debe hacer lo que ella quiere. Suele hacer sentir a su pareja como un afortunado por el simple hecho de estar con ella.

LA FEMINISTA: necesita un hombre al lado…pero para odiarlo. Es el tipo de mujer que siempre está enojada con el sexo opuesto, al que culpa de todas sus desgracias, y aprovecha cualquier oportunidad para criticarlo o restregarle sus errores. Además, es una desagradecida frente a los gestos de cariños.

LA ASFIXIANTE: es aquel tipo de mujer que quiere “marcar territorio” y controlarlo todo. Dentro de sus actitudes más comunes son las de llamar a la pareja en varias ocasiones al día. Si no le contestan, incluso llama a los amigos o a algún familiar. Hostigan con miles de preguntas del tipo: ¿dónde estás? ¿Con quién estás? ¿A qué hora vuelves? ¿Pero qué estás haciendo? Envían millones de Whatsapp, mensajes de textos y mails sólo para saber dónde está el pololo o marido, o para reportarse ellas mismas, sin que nadie se los haya pedido. A veces pueden realizar visitas sorpresa al trabajo o a ese happy hours que su pareja tenía con sus compañeros de oficina. En comportamiento en redes sociales, escriben frecuentemente en el muro de Facebook cuánto aman a su novio o cuánto se aman como pareja, o suben en Instagram o Twitter fotos cariñosas de ambos.

LA CORÍN TELLADO: es una verdadera emperatriz del drama. Para este tipo de mujeres, cualquier situación anómala o que no cumpla con sus expectativas, se convierte en una verdadera tragedia. Por eso, su reacción siempre es desproporcionada a la causa que la provocó, y suelen llorar, gritar o melodramatizarlo todo. Entre sus frases más comunes son: “Tenemos que hablar”; “Me gustaría saber en qué está esta relación”, “Me estoy dando cuenta que ya no te soy tan atractiva como lo era antes”. Como si fuera una verdadera teleserie venezolana, no les importa realizar escenas en público. Además, les fascina recibir muestras de amor en público, del tipo “flashmob”, algo que en general los hombres detestan hacer.

LA TWIGGY: es la de “mirada” anoréxica, que todo lo mide en “flacura” o “gordura”. Suelen hostigar a su pareja con preguntas diarias del tipo: “¿Estoy más flaca hoy?” “¿Estos pantalones me quedan más apretados?” “¿Tu secretaria es más flaca que yo?”. Y otra de las clásicas situaciones en que ponen a prueba la paciencia de sus acompañantes masculinos ocurre en las salidas a comer, donde suelen pedirse una ensalada, pero terminan apropiándose del plato del otro. LA TWIGGY 2.0 es la que, además, le usurpa el trago.

LA “EVANGELICA”: es la señorita bien portada, que tiene aires de superioridad para predicar de moral y buenas costumbres. En materia sexual, todo le da “asco” o lo encuentra inmoral. Jamás vería una película triple X con su pareja y se horroriza con los garabatos. Suele utilizar los tonos rosa y pasteles para vestirse y aritos de perla.

LA “CACHO”: es la típica mujer que sutilmente, y con su mejor (pero manipuladora) sonrisa, logra involucrar a su pareja en todo tipo de tediosas situaciones. Entre sus peticiones más comunes están: “Ay, acompáñame, si me demoro sólo 5 minutos”(y terminan demorándose 3 horas); “Por favor, ayúdame, si es un detallito nomás el que hay que arreglar en el baño”(y por supuesto, es una catástrofe). Cuando hay más confianza, estas situaciones se hacen expansivas a la familia: “Por favor, necesito que vayas a buscar a mi mamá al aeropuerto”. “¿Vas al partido? Nooo, recuerda que tenemos que ir a la Primera Comunión de mi sobrino”.