— ¿Por qué crees que Lindura le puso
cuernos a Boby?
—Estaba descuidada
— ¿Descuidada?
—Boby andaba hecho el casanova y bueno,
el que la busca, la encuentra
— ¿Y Josefina?
—Miguel me llevo a su casa, para
vanagloriarse de su éxito económico, mostrándome su palacete y a su bella esposa,
le pidió a ella que nos llevase unas cervezas y que preparase unos bocadillos,
en medio de la charla suena su móvil, él se disculpa y sale a patio, los dos lo
veíamos hablar, reía y se movía como una muñeca, mire a su esposa y ella me sonrió
tristemente.
— ¿De dónde ustedes se conocen?
—Fuimos compañeros en la facultad
— ¿Usted también es amigo de Fredo y
Quique?
—No, ¿Quiénes son ellos?
—Son los amigos de joda de mi esposo
La mire sorprendido, ella se ruborizo y volvió
a mostrar esa sonrisa triste. Escribí en un papel mi número de teléfono y le
dije que me llamase si lo veía oportuno. Me levante y me fui a despedir de mi ex
condiscípulo, ella me acompaño hasta la puerta, allí nos
miramos largamente y ella agito el papelito a modo de despedida.
Aquí nadie pierde el tiempo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hizo muy bien Lindura!!
ResponderEliminarComo se suele decir... para luego es tarde :)
ResponderEliminarBesitos
Uy... Josefina... también le pondrá los cuernos; pero claro, si el otro lo hace, por qué no ella?
ResponderEliminarMuchos besos.
Papelitos como esos nunca se rechazan...
ResponderEliminarSaludos,
J.
Es que la vida es muy corta para sonrisas tristes...
ResponderEliminarSaludos.
"Ex condiscípulo", ya entiendo tu entrada mas reciente.
ResponderEliminarSonrisa o mirada triste, el descuido y un papelito "oportuno", igual, pienso que mejor terminar antes de iniciar algo mas.
Un abrazo