— ¿Y bien qué?
— ¿Cómo que qué? ¿De qué estamos
hablando?
— ¿Usted y su amiga ya…?
— ¡Si apenas nos conocemos!
— ¿No le da vergüenza? Tomarse
esas confianzas con una muchacha a la que apenas conoce… No tiene sentido del
decoro. Supongo que se dará cuenta de que ha contraído la enfermedad.
— ¿Qué enfermedad?
— ¡Amor! Advertí los síntomas al
verle cruzar la plaza, la sonrisa tonta y la mirada idiota, la…
— ¡Por favor, basta!
— ¡Ha sido atacado por el virus! En fin, les ocurre a
los mejores. Yo mismo fui atacado. Pero, ¡ay! Resultó ser una criatura vana,
atraída solo por mi físico y ajena a la ternura de mis sentimientos.
Es verdad, se nota cuando ataca...sobretodo en la sonrisa tonta! jajajaja
ResponderEliminarBesos =)))
Este virus al contrario de otros que nos atacan, cuando lo pasas mal es cuando te deja...mientras lo tienes qué bonito se ve todo.
ResponderEliminarBesos
Si todos lo virus fueran como ese: aunque bueno, estos virus, que cojones también matan.
ResponderEliminarAbrazo.
Es un virus pasajero que se cura con el tiempo.
ResponderEliminarUn abrazo.
A mí me gusta ese virus, se pasa bien cuando te infecta.
ResponderEliminarHaces tonterías pero no te das cuenta.
Es como la gripe. Hoy la tiene, mañana no.
ResponderEliminarSaludos.
Parece estar salvado del virus :) Pero con seguridad le atacará tarde o temparo
ResponderEliminarMuchos besitos Chaly y feliz dia
Realmente el AMOR es una enfermedad.
ResponderEliminarBesos.
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