domingo, 12 de febrero de 2017

883: Anecdotas de un colegial

Yo estaba sentado en una esquina haciendo hora y pensando un poco de la vida, y entonces paran delante mío dos chicas una con un bebe en su cochecito... y ella se agacha para atender al bebe y como estaba con un pantalón bien pegadito se le baja por la agachada y le veo su ropa interior que era algo así como un hilo jejejeje y la otra se da cuenta y comienza a reírse Jajaja y yo me hago el loco nomas y hecho la mirada a otro lugar y la otra se va bien roja jajajaja...

Me empieza a picar la entre pierna (OH NO), tanto, que no pude resistir el impulso de rascarme. La cuestión es, que me resultaba tan agradable rascarme, que lo seguí haciendo por un rato. Para mi sorpresa, al día siguiente, durante el primer recreo, no solo compañeros de mi curso, si no también chicos de otros niveles, se acercaron y me preguntaron que había sido lo que ME HABIA EXCITADO TANTO, como para masturbarme en medio de la clase, al lado de una chica.
Los rumores son jodidos de detener. Pase el resto del año, y del siguiente, con mis compañeros pensando que yo me había masturbado.... 

Un día en el colegio. con una amiga la cuestión es que ella era una chica de esas que se ponen la falda bien arriba jejeje y cuando se sentaba a mi lado ¡uff! ya saben y yo tenía que cruzar las piernas para que no se note. Bueno yo era sano y sigo siéndolo jejeje pero ella mmm no, y mi amigo me jode diciendo que solo los cabros , geys o mujeres cruzan las piernas jojojo y ella me dice siéntate normal. y yo estaba palta plop no sabía qué hacer si me sentaba normal mmm ella se daría cuenta y mis amigos. NO SABIA que hacer entonces seguía así y de repente llega el profesor. y todos se paran y yo por obligación CASI LA MITAD DEL SALÓN se dio cuenta y un jaraneo total. y algunas miradas feas y ella fue la primera en darse cuenta mmmm y se mató de  risa. 


9 comentarios:

  1. Jajajajaja

    ¡Juventud divino tesoro!

    Un beso

    ResponderEliminar
  2. En eso las mujeres llevamos ventaja. Podemos disimular mucho mejor.

    ResponderEliminar
  3. Las vivencias del colegio nos marcan de por vida... Claro que sólo nos damos cuenta de ellos luego de haberlas atravesado dolorosamente...

    Saludos,

    J.

    ResponderEliminar
  4. En la adolescencia la hormonas empiezan a manifestarse con contundencia y nos pillan sin picardías para torearlas delante de la gente.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  5. Las hormonas a esas edades están disparadas.

    ResponderEliminar
  6. A estas edades, poco es lo que pasa... jajajaja

    Besitos

    ResponderEliminar
  7. De joven eso es incontrolable. Pobre pibe.
    Saludos.

    ResponderEliminar
  8. Bueno, situaciones embarazosas llenas de vida y explosión.

    ResponderEliminar