miércoles, 31 de mayo de 2017

974: Claudia Minoliti : Diario de una prostituta argentina

Las horas de la mañana, si no cuantitativa, por lo menos cualitativamente, son las mejores porque los clientes vienen recién duchados y fresquitos para liberarse antes de entrar a la oficina. Las horas de la noche, en cambio, los encuentran sucios y en ocasiones alcoholizados. Durante el día a menudo se acercan viejitos jubilados que a veces son más cálidos y generosos que los que tienen más poder de compra.
Más de uno termina proponiendo matrimonio, si es que no tienen a la viejita jubilada esperándolos en la casa con las salchichas y el chucrut a punto.  Los desempleados también son clientes habituales durante las horas más o menos muertas del día (así se utiliza parte del seguro de desempleo o de la ayuda social del generoso estado de bienestar alemán). Las horas del almuerzo, digamos entre las doce y las dos de la tarde, son igualmente bastante activas.
Algunos oficinistas aprovechan la pausa para cortarse el pelo, darse un masaje o mandar a lavar y planchar la camisa que llevan puesta. Otros prefieren pasar por el burdel.

El que me visita ahora habla un poco de español. Para él soy la dulzura personificada. Si fuera soltero, se casaría conmigo sin pensarlo dos veces. Fantasea permanentemente con librarse de la bruja prusiana que tiene por esposa desde hace más de quince años (son sus palabras, no las mías, yo por supuesto no conozco a la señora). Siempre dice que soy cálida y amable y que le doy todos los gustos. En cambio en casa, tiene que soportar gritos, insultos y peleas por cualquier pavada. Pobrecito. Yo lo escucho atentamente, y también escucho sus silencios mientras pague el tiempo de la escucha.

¿Tendrá que ver el silencio de las putas, el hecho de que ellas mismas no son las que hablan, siendo normalmente habladas por otros, usuarios o no? La prostitución es el negocio de la noche en penumbra, del ocultamiento, del secreto. ¿Será también por ese motivo que no hay tonalidades ni matices en la visión que se tiene de la prostitución desde afuera? ¿Por qué a las mujeres que no son putas les produce tanto rechazo la prostitución? ¿Se sentirán amenazadas? Si es así, ¿por qué razón?

¿Porque la puta le roba al marido? ¿Porque la puta le da al marido el placer que ella hace tiempo que no quiere o no puede darle? ¿Porque a ella le gustaría en secreto, muy en secreto, jugar a la puta aunque sea por un rato? ¿Porque ella también se siente puta cuando abre las piernas para que el marido se vacíe en casa y no afuera, para seguir teniendo esa casa y ese auto y esa ropa y esas vacaciones en la costa, sobre la arena fina, frente al mar azul? ¿Porque ella también podría vender su cuerpo si quisiera o si no tuviera alternativa? ¿Porque en definitiva todas las mujeres somos putas en potencia? ¿Por qué hay tanta gente que está convencida de que ser puta es tanto peor que ser empleada doméstica u obrera textil.
¿Cómo saben?, si seguramente no tienen experiencia en ninguno de los tres oficios.

7 comentarios:

  1. Buenoooooo. Cada uno con su vida y con su cuerpo hace lo que puede o quiere y en algunos casos lo que le dejan.
    Esta psicoanalista ya sabe que estamos en el siglo XXI, verdad?
    Hay de todo como en botica y habrá mujeres que vean mal la prostitución y habrá a otras que lo que nos repatea de la prostitución son las mafias, la trata de mujeres y niñas (lease también niños). No molesta que una mujer libremente decida vender unos servicios.Decir que si las mujeres ven mal la prostitución porque pueden quitar los maridos me parece a estas alturas del siglo en el que estamos un argumento bastante infantil y bastante retrógrado.

    Tan respetable es la mujer que libremente quiere ejercer la prostitución que la que no quiere hacerlo. A mi no me molestan en absoluto, pero como he dicho antes, las mafias, los delitos o los abusos que hay alrededor de la prostitución son los que me fastidian muy mucho. Pero que nadie se engañe, la prostitución no es como la película Pretty Woman.

    Besos

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  3. Elegir esa forma de vida no debe ser nada facil...

    :) Besos

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  4. Yo creo que no debe resultar nada fácil para una mujer elegir esa vida, aunque a más de una de ellas he oído decir alguna vez que prefieren prostituirse que fregar suelos.

    Abrazo.

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  5. Me imagino que esos disrios son todos iguales , sean de Argentina o de Italia.

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  6. Putas puden se muchas, pero prostituta suele ser una elección laboral. Para mi mujer son todas putas.
    Saludos.

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